Las emociones son parte de nuestra vida y de nuestro Yo, pero se convierten en un problema cuando no podemos controlarlas en las situaciones que se nos presentan, ciertamente, si logramos controlar las emociones podríamos controlar nuestros actos y actitudes de una forma más correcta. Quizás existen momentos en los que cada persona piensa que podría haber tenido otra actitud pero se dejo llevar por sus emociones, estas que perjudican a nuestra persona como la rabia y los celos, los nervios y la angustia. Pues para poder controlar estas emociones mediante la meditación debemos saber cual es su contra, es decir, para cada emoción, hay otra que cuando aparece la anula al instante. La idea de esto es suplantar una emoción por otra. Parece complicado pero te lo explicaré bien para que puedas hacerlo.
A continuación, una lista sobre las emociones:
- Ira
- Alegría
- Angustia/ Preocupación
- Melancolía
- Tristeza
- Miedo
- Susto o Pánico
¿ Para que nos sirve saber esto? pues sirve para que en momentos extremos donde nuestras malas emociones nos invadan, sepamos generar otra emoción que la controle, esto no sirve solamente a nivel espiritual sino que físico también, por ejemplo, una persona que sufre de polución nocturna como consecuencia del miedo, puede curarse de su dolencia si se le crea un motivo de preocupación así como los dolores de cabeza fruto de la ira se alivian si se le provoca tristeza a la persona. Esto no significa que debas vivir triste para no sentir ira sino que se utiliza para evitar esas emociones en momentos no indicados, por ejemplo cuando se discute con una persona, el sentir ira te lleva a decir cosas que quizás no piensas o sientes en verdad, por eso es importante saber controlar estas emociones. Luego de esto, busca en el blog Meditación Contemplativa ya que esta meditación utilizada con tus emociones te ayudara a comprender porque sientes tristeza, angustia, miedo, ira, pánico, etc.
Recuerda que todo cambio espiritual lleva su tiempo, pero saber estas cosas te serán útiles a ti y a quienes te rodean.
Comprender nuestras emociones es comprendernos a nosotros mismos